Alice Walton, heredera de la cadena Walmart y una de las mujeres más ricas del mundo, decidió dejar atrás décadas en finanzas para volcar más de 111 mil millones de dólares en proyectos filantrópicos centrados en la cultura, la salud y la educación.
Walton, hija de Sam Walton, fundador de Walmart, dio sus primeros pasos profesionales como analista de acciones en First Commerce Connection y posteriormente lideró inversiones en EF Hutton. En 1988 fundó Llama Company, un banco de inversión que presidió y dirigió hasta concentrarse en su obra solidaria.
Este año, su foco está en la apertura del Alice L. Walton School of Medicine, una escuela que busca unir medicina con artes y humanidades para abordar la salud desde una mirada integral.
Además, con la Fundación Art Bridges impulsada por Walton, se facilita el acceso al arte americano en museos pequeños y menos financiados, una estrategia para atraer más público y democratizar el patrimonio cultural.
Su fundación propia, Alice L. Walton Foundation, también financia diversas causas para mejorar la educación, la salud y el desarrollo comunitario, siguiendo una línea distinta a otros multimillonarios que apuestan a la tecnología.
Según la revista Forbes, Walton tiene una fortuna estimada en más de 111 mil millones de dólares. A diferencia de sus hermanos, no participa en la gestión directa de Walmart, enfocando su capital y esfuerzos en generar impacto social y cultural.
