San Lorenzo atraviesa la peor crisis institucional de su historia reciente. A menos de dos años de la asunción de Marcelo Moretti como presidente electo en 2023, el club quedó en acefalía tras renuncias masivas en la Comisión Directiva hace dos semanas.
En medio del caos político, el equipo se mantiene a flote en la Liga Profesional gracias a la dirección de Damián Ayude, que desde hace poco está al mando tras el empate 1-1 con Independiente. El DT, de 43 años, confesó que firmó un pacto silencioso con los jugadores para no involucrarse en la crisis política del club.
“Intentamos ser ajenos a lo que sucede en el club, tenemos un pacto con los jugadores. Entiendo que es difícil, pero lo están haciendo muy bien. Los chicos quieren a San Lorenzo por sobre todo y quieren ganar para darle una alegría a la gente”, explicó Ayude en diálogo con DSports.
Agregó que el plantel debe ser “inteligente a la hora de consumir y escuchar” y que “todo lo que pasa está por fuera de lo nuestro, que es trabajar, estar unidos y rendir”. El entrenador destacó el peso de los más de cuatro millones de hinchas que tiene el club y la responsabilidad de darles motivos de alegría.
Ayude reconoció que hacerse cargo de San Lorenzo “no fue fácil” pero lo vive con pasión: “Nunca dudé de ser el entrenador de San Lorenzo, es algo único. Espero estar mucho tiempo, es un equipo gigante. La gente me muestra mucho cariño”.
Con un cuerpo técnico joven y humilde, busca fortalecer el equipo en medio del conflicto institucional que golpea fuerte en la dirigencia y que amenaza con desestabilizar al club más grande de Boedo.
Mientras tanto, el equipo se enfoca en la cancha y apelan a la unidad para que la política interna no contamine el rendimiento. La incertidumbre sobre la normalización dirigencial sigue intacta y la hinchada espera que esta crisis sea solo un bache en el camino.
