Dos de los sospechosos detenidos por el millonario robo de joyas en el Museo del Louvre habían sido condenados juntos por un caso de robo similar hace diez años, confirmaron fuentes judiciales de París.
La fiscal Laure Beccuau precisó que el ADN del hombre de 37 años, acusado el sábado, apareció dentro de la plataforma elevadora usada para ingresar por la ventana del Louvre. Tiene un historial con 11 condenas previas, 10 relacionadas con robos. Otro sospechoso, de 39 años, con al menos 15 condenas, también tiene antecedentes similares y fue imputado el miércoles.
“Ambos estuvieron involucrados en el mismo caso de robo en París en 2015”, detalló Beccuau. Hasta ahora cuatro personas están bajo custodia, entre ellas un hombre de 34 años que se suma al grupo que la prensa francesa llama “comando”. También fue imputada una mujer de 38 años, pareja del principal sospechoso, por complicidad.
El ministro del Interior francés, Laurent Nuñez, habló con Le Parisien este sábado y confirmó que al menos uno sigue prófugo, junto con posibles instigadores o intermediarios que podrían tener las joyas. Aseguró ser “optimista” pero aclaró que no espera una recuperación rápida del botín.
“Estamos explorando todas las pistas en el mercado paralelo para evitar que las joyas se usen para lavado de dinero o comercio”, dijo Beccuau.
La investigación avanza en medio de la presión internacional para esclarecer uno de los robos más audaces en la historia del museo, que golpeó la imagen de seguridad en uno de los principales íconos culturales de Europa.


































