Estados Unidos confirmó un paquete de salvataje económico para Argentina que incluye un crédito stand-by y la posible compra de bonos argentinos para evitar una crisis financiera mayor. Así lo explicó el economista Cristian Ocampo en CIUDAD TV, detallando que se trata de un swap de monedas: EE.UU. entrega dólares y Argentina da pesos con una tasa acordada, lo que implica deuda y pago de intereses a futuro.
Este mecanismo busca proveer liquidez para importaciones, turismo, remesas y, sobre todo, el pago de la deuda vencida. Según Ocampo, el Fondo Monetario ya prestó lo que pudo con condiciones no cumplidas, por lo que ahora el Tesoro estadounidense aparece como prestamista de última instancia.
Además, el Tesoro estadounidense podría comprar bonos de deuda argentina si el mercado voluntario no renueva los vencimientos, garantizando así los pagos. Este respaldo bajó el riesgo país a 839 puntos, acercándolo a niveles que permitirían volver a los mercados voluntarios. El ideal sería cerca de 400-600 puntos para facilitar esa salida.
Ocampo advirtió que, aunque el secretario del Tesoro resaltó en redes sociales la consolidación fiscal y los esfuerzos del gobierno, el contexto interno en Argentina muestra otra realidad: caída industrial entre 10 y 20 puntos, conflictos sociales, reclamos universitarios y jubilatorios, y una fuerte conflictividad política.
El ministro de Economía, Alberto Caputo, planteó “ir por más gobernabilidad”, que según el economista significa bajar la tensión política y dialogar con la oposición y la sociedad para evitar un estallido mayor.
Hasta la semana pasada, el Banco Central ya había intervenido con más de 1.300 millones de dólares, una cifra extraordinaria para contener la crisis cambiaria que parecía inevitable.
Ocampo desmintió que el Gobierno pueda vender todos los dólares necesarios para evitar la crisis, ya que “en un clima de desconfianza no hay reservas que aguanten”. La coyuntura se frenó, pero el problema de fondo persiste y Argentina asumirá más deuda.
El economista dijo que el Gobierno está contra reloj para revertir un resultado electoral complicado. No lograrlo pondría en riesgo los futuros desembolsos del paquete, estimados en unos 10.000 millones de dólares. “La sociedad dijo ‘hasta acá llegamos’, no hay margen para mantener el mismo rumbo que llevó a esta situación”, añadió.
Por último, alertó sobre riesgos geopolíticos y el valor estratégico de los recursos argentinos. Pidió que el acuerdo pase por el Congreso y aclaró: “Estados Unidos no está haciendo esto por cariño a Milei”. El futuro del apoyo dependerá de los resultados electorales y del manejo que el Gobierno le dé a esta nueva oportunidad.
