Italjet, la histórica marca italiana nacida en 1960, vuelve a dar que hablar en Argentina con el Dragster, un scooter que rompe moldes y llega equipado con un sistema de dirección nunca antes visto en este segmento. Motor1 anunció que podrá probar durante una semana las versiones 200 y 300 del modelo, disponibles desde $7.900 y $9.900 dólares respectivamente.
La novedad más destacada es el ISS (Independent Steering System), un sistema patentado que reemplaza la clásica horquilla delantera por un basculante monobrazo de aluminio. Esto evita que la suspensión se hunda cuando se frena, mejorando la estabilidad y precisión al volante. Es algo poco frecuente en scooters, más propio de motos deportivas.
El Dragster 200 ofrece 19 caballos de fuerza y 17 Nm de torque. La versión 300 sube a 23,8 hp y 26 Nm, con diferencias menores en equipamiento que serán detalladas en la prueba completa que publicará Motor1 la próxima semana. Ambos modelos buscan posicionarse no solo como medios de transporte urbanos, sino también como “superbikes urbanas” capaces de atraer a un público que prioriza estilo y tecnología.
El fundador Leopoldo Tartarini, piloto reconocido y uno de los grandes de la historia motociclista italiana, marcó el camino desde los años 60 y el Dragster representa hoy un “renacer” de la marca en el segmento. Esta semana, Motor1 dispondrá del Dragster 200 equipado con accesorios de alto rendimiento de Malossi y un sistema de escape Akrapovič en titanio, para evaluar su uso diario con foco en performance.
Italjet San Isidro, el concesionario oficial inaugurado este año en el “Corredor Norte” de Buenos Aires, es el responsable de traer la marca a la región y ponerla a disposición del público local. Además, el Dragster promete ser un objeto de diseño para lucir y hablar en cualquier esquina, con una estética que se aparta de lo tradicional dentro de los scooters.
Tras un largo parate, Italjet volvió al ruedo en 2018 con esta nueva generación, presentada en EICMA, y ahora aterriza en Argentina con un producto poco visto que mezcla diseño, innovación y características deportivas. La expectativa está puesta en si el Dragster podrá ocupar un lugar preferencial en un mercado donde la movilidad urbana exige cada vez más tecnología y estilo.
La prueba práctica empezará esta semana y el análisis completo se conocerá en los próximos días, pero por ahora el Dragster representa una poderosa apuesta por una movilidad distinta, destinada a quienes buscan mucho más que un simple scooter.
