Diez personas comenzaron a ser juzgadas este lunes en París por acosar a la primera dama francesa, Brigitte Macron, con rumores falsos sobre su identidad de género en redes sociales. Los acusados, entre 41 y 60 años, enfrentan cargos por ciberacoso tras publicar insultos, chistes, fotomontajes y desinformación que aseguraban que Brigitte es en realidad un hombre.
Este juicio llega tras años de silencio de la pareja presidencial, cansada de la ola constante de ataques y falsedades. La teoría conspirativa que persigue a Brigitte Macron comenzó a circular después de la elección de Emmanuel Macron en 2017 y se acrecentó recientemente cuando la influencer estadounidense pro-Trump Candace Owens difundió el rumor internacionalmente, ganando tracción entre seguidores MAGA en EE.UU.
La Fiscalía francesa deberá probar que el acoso afectó la salud mental de la primera dama para conseguir una condena. De confirmarse, las penas por ciberacoso pueden alcanzar hasta dos años de prisión. Los acusados provienen de diversos perfiles y ahora corren riesgo de ser expulsados de las plataformas digitales.
La ofensiva judicial es poco común para un mandatario como Macron, quien decidió actuar frontalmente contra la desinformación para frenar el daño reputacional y psicológico. La historia tiene su raíz en el romance entre Brigitte y Emmanuel, iniciado cuando era su profesora en Amiens, ciudad del norte francés.
Con este proceso, los Macron buscan enviar un mensaje firme contra el ciberacoso y la viralización de noticias falsas que, según ellos, cruzaron un límite personal y legal inaceptable.

































