Durante la 80° Asamblea General de la ONU en Nueva York, el presidente Javier Milei volvió a lanzar críticas duras contra el organismo y su dirección actual. Milei acusó a la ONU de haberse alejado de su objetivo original y de imponer “extralimitaciones” disfrazadas bajo “agendas nobles”.
El mandatario argentino sostuvo que la ONU dejó atrás el modelo clásico de cooperación entre estados para ceder espacio a una “gobernanza supranacional” que pretende “imponer un modo de vida determinado a los ciudadanos del mundo”.
“La ONU se alejó de su norte en las últimas décadas. El exitoso modelo fundado en la cooperación fue reemplazado por burocracias internacionales que quieren limitar nuestras vidas”, afirmó Milei.
A pesar de sus críticas, Milei afirmó que respeta el propósito original del organismo y reconoció que hay problemas globales que requieren diálogo y cooperación. Sin embargo, advirtió que Argentina no apoyará políticas que “cercenen libertades individuales, comerciales ni violen derechos naturales”.
En su duodécima visita a Estados Unidos desde que asumió la presidencia, Milei fue tajante al defender la libertad económica y denunciar el estancamiento político y económico global. “Los dirigentes prefieren mantener el statu quo aunque eso signifique incendiar el futuro para mantener caliente el presente”, dijo.
También alertó que los gobiernos y la sociedad optan por repartir “la riqueza de hoy en lugar de generar la riqueza de mañana”, en un mensaje que combinó críticas al multilateralismo con un fuerte llamado a la libertad individual y económica.
La intervención de Milei se produce en medio de un contexto internacional complejo y ante un auditorio de jefes de Estado y representantes de todo el mundo, lo que posiciona a Argentina como un actor crítico frente a las dinámicas multilaterales actuales.
