El presidente Javier Milei convocó a la mayoría de los gobernadores a la Casa Rosada tras la victoria de Libertad Avanza en las legislativas 2025. La reunión busca consolidar la relación con las provincias, aunque cuatro mandatarios no asistirán: Axel Kicillof (Buenos Aires), Gildo Insfrán (Formosa), Gustavo Quintela (La Rioja) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego), la mayoría opositores que no firmaron el Pacto de Mayo.
Kicillof dijo que no fue invitado y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, respondió que “siempre plantea diferencias ideológicas, para Milei es perder el tiempo”.
En materia económica, los datos oficiales muestran tensiones clave. Las transferencias de coparticipación federal aumentaron un 1,4% real respecto a 2024, pero caen 11,2% frente a 2023, el último año del Frente de Todos. El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) ubicó estas transferencias en el sexto lugar de los últimos 10 años.
Las transferencias discrecionales, que dependen del Ejecutivo nacional, se desplomaron 50,7% respecto a 2023. La Rioja fue la más afectada con una caída del 87,9%, seguida de Formosa y La Pampa. La Ciudad de Buenos Aires fue la que menos perdió (-6,2%) y en 2025 recibió un aumento del 57,3% tras acatar un fallo de la Corte Suprema sobre recursos coparticipables.
El Fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN), un mecanismo para atender emergencias provinciales, se reactivó fuerte en 2025 con un aumento real del 211% frente a 2024, aunque sigue 30% por debajo de 2023. Neuquén recibió el mayor desembolso: $15 mil millones, seguida por Salta, Santa Fe, Tucumán y Buenos Aires.
En contraste, las transferencias para obras públicas aumentaron 102% respecto a 2024, pero están un 94% por debajo de 2023 y 89% menos que en 2019. Más de la mitad de las 2.700 obras heredadas del gobierno anterior están paralizadas, concentradas en Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, según un relevamiento de Chequeado para la Red Federal de Periodismo e Innovación.
La relación entre Milei y los gobiernos provinciales arranca con un mix de aumentos modestos, fuertes recortes en partidas discrecionales y la tensión abierta con gobernadores que cuestionan su estilo y políticas.
 
						
									


































 
					 
								
				
				
			 
							 
							 
							 
							 
							 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				