Un objeto metálico de grandes dimensiones fue hallado en un campo de Puerto Tirol, Chaco, y trasladado esta semana a Buenos Aires para su análisis. El artefacto, un cilindro de fibra de carbono de 1,70 metros de largo por 1,20 de diámetro, fue descubierto en el predio conocido como ex Campo Rossi.
Bomberos de Resistencia y efectivos policiales confirmaron la presencia del cilindro tras un llamado de vecinos el jueves por la tarde. Según el director del Centro Aeroespacial de la Fuerza Aérea, Rubén Lianza, el objeto sería un tanque de combustible utilizado en maniobras orbitales al inicio o el final de misiones espaciales.
El cilindro tiene un orificio visible en un extremo y un sistema de válvulas en el otro, además de una inscripción con un número de serie clave para rastrear su origen. Los especialistas sospechan que es chatarra espacial, restos de satélites o cohetes que vuelven a caer a la Tierra. Aunque en Argentina estos casos son poco frecuentes, la cantidad creciente de lanzamientos al espacio aumenta la posibilidad de estos incidentes.
Cumpliendo estrictos protocolos, el objeto fue trasladado a Buenos Aires para realizar peritajes detallados. El personal que manipuló el cilindro pasó por chequeos médicos de rutina, sin reportar intoxicación ni exposición a radiación. Lianza descartó riesgos por toxicidad o radiactividad, aunque advirtió que la fibra de carbono puede ser dañina al contacto.
La clave estará en el análisis del material y en el número de serie que ayudará a determinar si proviene de alguna misión estatal o privada reciente. Mientras la investigación avanza, en Puerto Tirol el hallazgo generó sorpresa y desconcierto, pero sin riesgos a la población.
