En la 11° Expo Industrial, Comercial e Innovación Tecnológica de Comodoro Rivadavia, Urbana apuesta a cambiar el paradigma de la basura. Su gerente, Levan Macharashvili, dejó claro que el objetivo es generar diálogo entre la comunidad, las empresas y la Municipalidad para que los residuos sean tratados como recursos, no como desechos.
“Si no hay diálogo entre la gente, la empresa y la Municipalidad, los residuos se transforman en basura”, dijo Macharashvili a Crónica. La clave, explicó, está en la clasificación y la recuperación de materiales reciclables, una responsabilidad que tanto ciudadanía como industria deben asumir.
La planta de tratamiento de Urbana funciona como una “universidad de residuos”, donde se fomenta el aprendizaje y el desarrollo de soluciones para industrializar el reciclaje en la ciudad. Allí se reúnen emprendedores que buscan darle valor a lo que antes era descartado.
Macharashvili destacó que la sostenibilidad es un objetivo colectivo. Recordó un episodio en las playas de Caleta Córdova, donde pese a distribuir 450 bolsas para residuos y ofrecer bateas para depositarlas, sólo se devolvieron 74 bolsas, dejando residuos esparcidos en el área. “Es una cuestión de ética”, afirmó.
El gerente insistió en que la educación ambiental comienza desde la infancia: en jardines de infantes se enseña la diferencia entre residuos y compostaje, promoviendo esa conciencia como una “cuestión de actitud”.
“Hemos dejado de ser una empresa de basura para ser una empresa de recolección de residuos”, sintetizó Macharashvili, marcando un cambio de enfoque fundamental en el manejo ambiental de la ciudad.
Urbana reafirma así su compromiso con una ciudad más sostenible, donde el diálogo y la cooperación sean la base para evitar que el residuo termine en la basura común.
