La Policía de Paraguay capturó a Erick Luis Moreno Hernández, alias ‘El Monstruo’, jefe de la organización criminal Los Injertos del Cono Norte, en una vivienda humilde de la ciudad de San Lorenzo, a 15 kilómetros de Asunción. La operación se concretó el 24 de septiembre tras meses de seguimiento y presión policial binacional.
Moreno Hernández pasó de coordinar sus operaciones desde lujosas residencias equipadas con piscinas y cinco celulares para comunicarse con sus cómplices en Perú, a refugiarse en barrios de clase media baja para no ser detectado. Tras la captura de colaboradoras clave y la reducción de los recursos ilícitos que recibía desde Lima, se debilitó su estructura y su entorno.
El ministro paraguayo Carlos Malaver explicó que las limitaciones financieras forzaron a ‘El Monstruo’ a mudarse constantemente, hasta instalarse en una casa alquilada de San Lorenzo donde nunca salía. Una mujer lo acompañaba permanentemente para manejar envíos de dinero y cuidados personales.
El seguimiento judicial evidenció errores en las transferencias de dinero que hicieron sus colaboradores desde Perú, un punto clave que permitió estrechar el cerco. Moreno Hernández es responsable de extorsiones a empresarios, secuestros, homicidios y amenazas a policías peruanos, además de ataques contra figuras públicas como el grupo musical Armonía 10.
Actualmente el caso está en manos de la Policía Nacional del Perú, la División de Inteligencia y la Dirección Nacional de Investigación Criminal, quienes avanzan en el análisis forense de teléfonos y documentos bajo supervisión del Ministerio Público.
La caída de ‘El Monstruo’, uno de los criminales más buscados de la región, refleja el impacto de la cooperación internacional y el seguimiento financiero para desmantelar bandas transnacionales que operan atentando contra la seguridad y la economía de varios países.
