Colombia está acelerando el uso de inteligencia artificial (IA) para conservar su biodiversidad, según un informe académico reciente divulgado esta semana.
El país, que alberga una de las mayores riquezas biológicas del mundo, enfrenta una amenaza constante por la deforestación y la pérdida de ecosistemas. La nueva apuesta es aplicar herramientas tecnológicas inteligentes para monitorear especies, detectar cambios ambientales y apoyar decisiones de conservación.
El estudio titulado Inteligencia Artificial para la conservación y uso sostenible de la biodiversidad, una visión desde Colombia, destaca cómo la IA permite procesar grandes cantidades de información ambiental que antes eran imposibles de manejar en tiempo real. Esto ayuda a anticipar riesgos y mejorar la gestión de recursos naturales.
Grupos científicos y organizaciones locales están implementando sistemas de reconocimiento de voz y vídeo para registrar la fauna silvestre sin intervención humana directa. También usan modelos predictivos para identificar zonas críticas y priorizar acciones de protección.
La iniciativa pone a Colombia como referente regional en la intersección entre tecnología y medio ambiente. Expertos señalan que estas herramientas son clave para cumplir metas ambientales nacionales e internacionales.
Sin embargo, advierten que el impacto real depende de inversión continua y cooperación entre el sector público, privado y comunidades indígenas que conocen el terreno.
El uso de IA no solo ayudará a conservar especies en riesgo, también fortalecerá la inteligencia territorial para políticas de desarrollo sostenible en un país que, pese a sus avances, sigue perdiendo cobertura forestal.
Este avance tecnológico llega en un momento en que la preocupación global por el cambio climático y la biodiversidad impulsa gobiernos a buscar soluciones más efectivas y precisas.
Colombia, con su amplia diversidad —incluyendo miles de especies endémicas de flora y fauna—, busca convertir la inteligencia artificial en una herramienta decisiva para la protección ambiental que beneficiará a sus generaciones futuras.
