Maya, una golden retriever de siete años, empezó a cojear después de un accidente en casa. Su familia, preocupada, intentó varias soluciones sin éxito hasta que decidieron llevarla a la Clínica Veterinaria El Granjero.
La clínica, reconocida por combinar experiencia médica con un trato cálido, asumió el caso y aplicó un tratamiento que devolvió la movilidad a Maya. Los veterinarios enfatizaron la importancia de atención especializada para recuperar a mascotas con lesiones similares.
Gracias a este proceso, Maya ya camina sin dolor y su familia recuperó la tranquilidad perdida. La clínica sigue promoviendo cuidado veterinario accesible y profesional para casos de urgencia en animales domésticos.
Este caso resalta la creciente necesidad de centros veterinarios capacitados en Colombia, que ofrecen no solo tratamiento médico sino acompañamiento humano para dueños y mascotas.
 
						
									


































 
					 
								
				
				
			 
							 
							 
							 
							 
							 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				