Un grupo de cuatro jóvenes, dos disfrazados de Spider-Man, protagonizó una peligrosa escena la noche de Halloween en Bogotá.
Esperaron sobre una estación del TransMilenio para subirse al techo de un articulado en movimiento. Ya arriba, cada uno encendió dos bengalas de colores y comenzaron a lanzar pólvora al aire mientras el bus seguía su ruta sin percatarse.
La escena fue captada con drones y celulares, varios videos circularon rápidamente en redes sociales. Tras avanzar varios metros, los jóvenes saltaron del bus en marcha y siguieron lanzando pólvora en la calle sin que la Policía o la empresa TransMilenio intervinieran.
Según el Manual de Usuario de TransMilenio, esta conducta está prohibida y sancionada con una multa tipo 1, equivalente a cuatro salarios mínimos legales vigentes, por “perturbar la tranquilidad de los demás en el transporte público”.
Hasta el cierre de esta nota, ni la Policía de Bogotá ni TransMilenio se habían pronunciado oficialmente sobre el incidente, que pudo terminar en tragedia o causar accidentes graves.
Uno de los jóvenes responsables difundió el video en Instagram, donde ya acumula más de 560 mil vistas y miles de interacciones. Se cree que el mismo es el que semanas atrás se grabó caminando sobre las vigas de la obra del Metro en la Avenida Caracas, lo que muestra un patrón de conductas de alto riesgo.
Esta acción genera preocupación y debate sobre la seguridad en el transporte público y la falta de medidas para evitar estos actos que ponen en riesgo a los usuarios y a los propios responsables.


































