La OTAN anunció este martes que reforzará su defensa en el flanco este de Europa tras un aumento en las violaciones del espacio aéreo por parte de Rusia.
El Consejo del Atlántico Norte, principal órgano de decisión de la Alianza, sostuvo conversaciones urgentes para aprobar el ingreso inmediato de cazas de combate a Estonia. Esta medida busca detener la escalada de provocaciones rusas y asegurar la integridad territorial de sus miembros en la región.
La Alianza condenó las recientes incursiones aéreas no autorizadas sobre su espacio en el este europeo y exigió a Moscú que ponga fin a esta “escalada”. El llamado es claro: cualquier amenaza contra un país miembro será enfrentada sin titubeos.
La decisión se da en medio de la creciente tensión en la zona, donde Rusia ha incrementado sus operaciones militares cerca de las fronteras de los países bálticos. Estonia, miembro estratégico de la OTAN, recibe ahora un apoyo militar reforzado para proteger su soberanía.
Este movimiento muestra la voluntad de la OTAN para mantener control y seguridad ante lo que considera una agresión directa. Las autoridades han declarado que no buscan conflictos, pero sí están preparadas para responder ante cualquier ataque.
Hasta el momento no se han registrado incidentes mayores desde la implementación de la medida, pero la vigilancia se mantiene al máximo nivel. La situación seguirá siendo monitorizada de cerca por la comunidad internacional.
