El presidente Gustavo Petro confirmó este miércoles que el Gobierno no tiene dinero para solucionar definitivamente los derrumbes en la Vía al Llano, afectada por cierres intermitentes desde hace más de 15 días.
“No tenemos el dinero hoy para arreglar la carretera al Llano. Dado el éxito de la oposición en hundir la ley de financiamiento en el año 2024”, dijo Petro, señalando además que un exgobernador cercano a esa oposición ha afectado las finanzas públicas.
Petro cuestionó el contrato de concesión, que excluyó al concesionario de las obras necesarias en las zonas más inestables de la vía. Por esa decisión, el mantenimiento pasa a estar a cargo del Estado, que hoy no cuenta con los recursos para afrontar esas obras.
“Solo un procedimiento de emergencia podría ayudarnos a financiar las obras y se necesitan para ya. Espero de la Corte su apoyo para superar el problema en este invierno”
El mandatario hizo un llamado a las Altas Cortes para que autoricen un decreto de emergencia económica que permita liberar recursos ante la urgencia causada por los derrumbes.
Esta vía clave que conecta Bogotá con Villavicencio opera con pasos alternos controlados por horarios de dos horas, lo que limita el tránsito vehicular y afecta transporte de alimentos y mercancía.
El sector turístico reportó pérdidas superiores a $30 mil millones debido a cierres y restricciones, según Cotelco Meta.
Entre las hipótesis sobre las causas de los deslizamientos, algunos apuntan a construcciones ilegales en la zona, pero el gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey Ángel, rechazó esta versión.
“Para la concesión Coviandina, las 12 viviendas rurales dispersas en la vereda Caraza serían las culpables, pero allí viven menos de 40 campesinos dedicados al cultivo de aromáticas y hortalizas”
Rey Ángel sugirió que el problema real es la acumulación de miles de metros cúbicos de agua filtrada en las laderas desde las cunetas cerca del kilómetro 16, agua que desestabiliza el terreno.
Según el gobernador, la anterior concesión construyó canales y pozos para mitigar ese filtrado, pero las lluvias y el terreno geológicamente inestable continúan generando deslizamientos.
El futuro inmediato de la Vía al Llano depende de la aprobación judicial para declarar la emergencia económica y disponer el presupuesto necesario para obras de mitigación urgentes. Petro mantiene la presión sobre la Corte para que respalde esta medida antes de que empeore la temporada invernal.
