El presidente Gustavo Petro confirmó este lunes que Colombia terminará el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Israel en respuesta a la ofensiva militar israelí sobre la Franja de Gaza.
En el Consejo de Ministros, Petro fue claro: “Con Israel deja de haber TLC. Las carboneras que exportan deben plegarse o vender sus concesiones. Y, ministro de Hacienda (Germán Ávila), las compramos, porque me temo que hay más valor en la infraestructura que en el carbón que está enterrado”, afirmó.
La medida plantea un reto importante para el sector carbonífero del país y marca un giro en las relaciones comerciales bilaterales. Petro no solo anuncia el fin del acuerdo, sino que advierte a las empresas que deben alinearse o vender sus concesiones al Estado.
En respuesta, la periodista y precandidata presidencial Vicky Dávila calificó la decisión como “muy grave” y amenazó con revertirla si llega a la Presidencia en 2026. Para ella, la oferta estatal de compra es una expropiación similar a las políticas de Hugo Chávez en Venezuela.
“Petro anuncia que se acaba TLC con Israel y amenaza a las carboneras a venderle al Estado como hacía Chávez. Expropiación”, dijo Dávila.
Dávila aseguró que su gobierno restaurará las relaciones con Israel desde el 7 de agosto de 2026, protegerá el TLC y permitirá que las carboneras retomen una industria pujante con ese país. Además, criticó que el gobierno de Petro busca cortar los lazos comerciales y dañar sectores productivos del país.
Diplomacia y tensiones internas
La polémica no solo se limita a Israel. Dávila también desestimó la renuncia de la ministra de Relaciones Exteriores, Rosa Villavicencio, a su visa estadounidense, calificándola como un gesto “irrelevante” que no afectará las relaciones con Estados Unidos.
En su cuenta en X, la precandidata acusó al gobierno de buscar la confrontación y dijo que Petro está empeñado en dañar las exportaciones y el empleo, en lugar de privilegiar el diálogo y la estabilidad.
Por otro lado, la periodista se mostró dura con el manejo que Petro hizo de la responsabilidad internacional al involucrar al expresidente estadounidense Donald Trump en posibles crímenes. Para Dávila, esas declaraciones solo ponen en riesgo la economía nacional y las relaciones bilaterales con Estados Unidos.
“Está suplicando sanciones. Un bárbaro, un irresponsable. Quiere destruir exportaciones, negocios y empleos. Nos haría bien que se fuera a combatir a Gaza y se quedara por allá”, afirmó Dávila.
En medio de una escalada de críticas, el Presidente Petro apuesta por una postura firme frente al conflicto en Gaza y ajusta la política exterior colombiana con movimientos que generan división política interna y preocupación en sectores productivos.
Los próximos meses serán claves para ver cómo estas medidas afectarán las relaciones comerciales y diplomáticas con Israel y EE.UU., y cómo impactarán el sector del carbón, vital para algunas regiones del país.
