La Policía Nacional de Colombia aclaró este lunes que la lancha interceptada en el Pacífico con más de 2,7 toneladas de cocaína había salido desde las costas de Timbiquí, Cauca, rumbo a Costa Rica.
El decomiso se dio gracias a labores de inteligencia que, el 6 de octubre, permitieron identificar la embarcación clandestina. Esa información fue compartida el mismo día con la DEA en Bogotá, que posteriormente coordinó con las autoridades costarricenses para la interdicción.
El operativo en aguas internacionales fue ejecutado por el Servicio Nacional de Guardacostas de Costa Rica el 7 de octubre, y el 10 la DEA certificó oficialmente la cantidad exacta del cargamento: 2.758 kilos y 68 gramos de cocaína.
El presidente Gustavo Petro había informado inicialmente que el cargamento pesaba 2,7 toneladas, sin embargo el ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Mario Zamora, corrigió detalles asegurando que el peso exacto fue 2.371 kilos, que la información sobre la operación vino de la DEA, y que los capturados fueron dos colombianos y tres costarricenses.
La Policía Nacional confirmó los nombres de los detenidos: los colombianos Carlos Palacios Castillo, Horlimg Campas Camacho y Yanny Asprilla Gómez, además de los costarricenses Allan Jacob Mora Ramírez y Harol Enrique Gutiérrez Ampie.
Este caso refuerza la cooperación internacional para combatir el narcotráfico y mantiene la vigilancia en el litoral Pacífico caucano, una ruta clave para el tráfico de drogas hacia Centroamérica y Estados Unidos.
La Policía insistió en que el resultado fue posible por el trabajo conjunto con la DEA y las autoridades costarricenses, demostrando un frente unido contra el crimen organizado.
