Este 16 de octubre se cumple un año de la muerte de Liam Payne, exintegrante de One Direction, tras caer desde el tercer piso del Hotel CasaSur en Palermo, Buenos Aires. La investigación apunta a una mezcla letal de cocaína, alcohol, y sertralina, un antidepresivo que según los peritos intoxicó al cantante y lo dejó en un estado de estupor previo a su caída fatal.
La autopsia confirmó que Payne tenía 2.7 gramos de alcohol por litro en sangre, cinco veces más que el límite legal para conducir, y un fuerte traumatismo craneal que causó su muerte. En su habitación quedaron rastros de droga y una televisión destrozada. Dos mujeres que había contratado y su contacto local, el empresario argentino Rogelio Nores, abandonaron el lugar horas antes.
El fiscal Andrés Madrea investigó 800 horas de video, análisis toxicológicos y pericias telefónicas. De esta forma identificó y acusó a Braian Paiz, mesero de Puerto Madero, como quien le vendió cocaína a Payne. También se imputó a Ezequiel Pereyra, empleado del hotel, por entrega de estupefacientes.
Nores y otros directivos del hotel fueron inicialmente imputados por abandono seguido de muerte, luego reclasificado a homicidio culposo, pero la Sala IV de la Cámara rechazó la acusación al considerar que Payne tenía libre voluntad, a pesar de su adicción. La querella encabezada por Cheryl Cole, madre del hijo de Liam, sigue activa y no ha descartado nuevas pruebas.
Actualmente, solo Paiz y Pereyra están detenidos a la espera del juicio en el Tribunal Oral N°30 presidido por el juez Sergio Paduczak. Paiz está en la alcaidía de la Policía de la Ciudad en Chacarita; Pereyra, en Marcos Paz. El juez pidió trasladar a Paiz a una prisión federal próximamente.
La defensa de Paiz, a través de sus abogados Fernando y Juan Pablo Madeo Facente, sostiene que no hay pruebas claras de venta de droga sino solo de entrega gratuita y que su cliente no tenía ánimo de lucro. Además, denuncian condiciones duras en la cárcel y consideran que su proceso judicial será breve, posiblemente durante la feria de verano.
“Braian no siente que tenga que pedir disculpas a la familia de Liam, fue algo consentido entre adultos”, dijo uno de sus abogados.
La causa atravesó varias instancias y fue devuelta al fuero nacional tras estudiar el narcomenudeo. La Fiscalía continúa con la producción de pruebas y las partes se preparan para el juicio, aún sin fecha definida. Geoff Payne, padre del cantante, es un testigo clave aunque probablemente no declare presencialmente.
Este caso sigue en la mira por la repercusión internacional y la necesidad de respuestas sobre la muerte de una estrella mundial en Buenos Aires.
