El volcán Kilauea, uno de los más activos del mundo, continúa en erupción y despeja el cielo con potentes chorros de lava desde sus cráteres sur y oeste en la isla de Hawái.
Las cámaras del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) captaron esta mañana imágenes impresionantes donde los ríos de lava se unen y avanzan atravesando el terreno rocoso, creando un espectáculo visible a varios kilómetros de distancia.
Las autoridades mantienen restringida la zona para evitar riesgos. Alertan que, además de la lava, hay emisiones de gases tóxicos que pueden afectar la salud y la posibilidad de temblores asociados a la actividad volcánica.
Los flujos de lava, muy activos en los cráteres sur y oeste, han cambiado el paisaje y obligan a las autoridades locales a mantener vigilancia constante, ya que la actividad puede aumentar sin aviso.
El Kilauea es conocido por su erupciones violentas y continuas que han causado evacuaciones en el pasado. Por ahora, no se reportan víctimas ni daños materiales fuera de la zona restringida, pero el fenómeno sigue generando alerta entre la población y expertos.
El USGS y equipos de emergencia refuerzan los monitoreos con drones y sensores para evaluar la evolución de la actividad volcánica y ampliar advertencias si es necesario.
Se recomienda a residentes y turistas evitar acercarse a la zona y atender las indicaciones oficiales para evitar incidentes relacionados con esta erupción.
