Morelia, Michoacán.- Mientras los altares de Día de Muertos se retiran en la ciudad, estudiantes del Colegio de San Nicolás montaron un altar en memoria del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, asesinado el 1 de noviembre.
La iniciativa, explicaron los jóvenes, surgió como una protesta simbólica frente a la creciente inseguridad que vive Michoacán y el país. “Estamos muy consternados por la situación. Desde nuestras trincheras quisimos manifestarnos de una manera pacífica, pero que también llame la atención de la sociedad sobre lo que está pasando”, dijo la alumna Alejandra Montserrat.
El altar, decorado con flores de cempasúchil, veladoras y una foto del edil, no solo honra su memoria, sino que busca generar reflexión colectiva sobre la violencia que afecta a la ciudadanía. “¿Cuántos activistas más, cuántas madres, hijas o compañeros nos tienen que arrebatar para que decidamos alzar la voz?”, cuestionó Alejandra.
Los estudiantes dejaron claro que no buscan convertir a Manzo en mártir sino en un símbolo del abandono y la inseguridad que sufren los habitantes. “La muerte del presidente municipal fue un golpe muy fuerte, pero también una llamada a unirnos como sociedad. No queremos más silencio”, agregó.
El altar se ha convertido en punto de reunión para los alumnos, quienes con respeto y dolor enfrentan la realidad violenta que vive su estado.
						
									

































