Un grupo intentó tomar la Facultad de Medicina de la UNAM durante la noche de ayer, lo que obligó a suspender todas las actividades programadas para este miércoles. La movilización generó tensión entre estudiantes y autoridades, que permanecen pendientes de la situación.
Hasta el momento no se reportan lesionados ni detenidos, pero la decisión de cancelar clases busca evitar confrontaciones y garantizar la seguridad dentro del recinto. La UNAM no ha dado detalles oficiales sobre las demandas o motivos detrás del intento de toma.
Estudiantes que no participaron en el intento de toma expresaron preocupación por la interrupción de clases y pidieron diálogo para resolver el conflicto. Mientras tanto, la dirección de la Facultad mantiene vigilancia permanente y evalúa acciones para restablecer la normalidad.
Este incidente se suma a una serie de conflictos recientes en la universidad que han afectado distintas facultades. Se espera un pronunciamiento oficial en las próximas horas.
