Una protesta pacífica para exigir justicia por el asesinato de Carlos Manzo Rodríguez, presidente municipal de Uruapan, terminó en violencia y fuego en Morelia esta tarde.
Alrededor de las 16:00 horas, decenas de manifestantes se reunieron en el Jardín Morelos con pancartas y consignas. De ahí partieron hacia el Palacio de Gobierno en el Centro Histórico, donde un grupo irrumpió al derribar la puerta principal.
Dentro del inmueble estatal, vandalizaron mobiliario, grafitearon muros y lanzaron bombas molotov que provocaron incendios en varias oficinas, dañando muebles y papelería. Fue un estallido de violencia en un lugar histórico para Michoacán.
La Secretaría de Seguridad Pública intervino rápido, dispersando a los manifestantes con gas lacrimógeno y toletes ante esta escalada. Hasta el cierre de la información, no se reportan detenidos ni el monto total de daños.
La movilización fue la reacción directa al homicidio de Manzo Rodríguez, un golpe que mantiene sacudida a la política municipal y al estado. La justicia y seguridad en la región continúan en foco tras este episodio que dejó una marca visible en Morelia.


































