El enviado especial del gobierno de Donald Trump, Richard Grenell, lanzó un duro ataque al Premio Nobel de la Paz tras la polémica decisión de otorgar el galardón 2025 a la venezolana ultraderechista María Corina Machado.
“El Premio Nobel murió hace años”, escribió Grenell el viernes en sus redes sociales, criticando la decisión que también cuestionó el director de Comunicaciones de la Casa Blanca, Steven Cheung, quien aseguró que el comité del Nobel “antepone la política sobre la paz”.
La controversia generó reacciones en varios sectores políticos de Estados Unidos. Desde la derecha, algunos reclamaron que el presidente Donald Trump debería haber sido el merecedor, mientras que la izquierda calificó como ilógico premiar a Machado, una fuerte promotora de intervenciones militares extranjeras en Venezuela.
El presidente ruso, Vladimir Putin, también criticó la entrega: “En mi opinión, estas decisiones han dañado enormemente la autoridad del premio”, dijo al recordar casos anteriores donde según él, el Nobel no reconoció verdaderos esfuerzos por la paz.
Trump, que desde febrero pasado ha buscado una nominación, declaró entonces: “Lo merezco, pero nunca me lo darán”. El mandatario afirma haber contribuido a terminar siete conflictos armados globales, entre ellos disputas en Asia, Europa y Medio Oriente.
Esta disputa pone en entredicho la credibilidad del Nobel de la Paz en medio de tensiones políticas internacionales y debates sobre intervencionismo y diplomacia.
