El presidente Donald Trump anunció que pone fin a las negociaciones comerciales con Canadá, profundizando la crisis en América del Norte. La decisión ocurre tras la difusión de un anuncio por el gobierno de la provincia de Ontario, que usó sin permiso un clip con un discurso de 1987 del expresidente Ronald Reagan criticando los aranceles a productos extranjeros.
En ese discurso, Reagan advirtió que las tarifas dañan a “todos los trabajadores y consumidores estadounidenses” y provocan “feroces guerras comerciales”. La Fundación Ronald Reagan calificó el spot como una tergiversación y rechazó que el gobierno de Ontario haya pedido autorización para usarlo.
Actualmente Estados Unidos aplica aranceles del 35% a productos canadienses que no cumplen con el T-MEC, además de un 25% a vehículos ligeros (cuando excluyen contenido estadounidense) y un 50% a acero, aluminio y cobre. Estas medidas están asociadas a acusaciones de falta de cooperación canadiense en temas de fentanilo y migración.
Trump acusó que Canadá “usó un anuncio fraudulentamente” con la intención de influir en la Corte Suprema y otros tribunales que evalúan la legalidad de los aranceles. Al mismo tiempo, ambas naciones siguen negociando sobre tarifas y represalias, con una revisión formal del T-MEC prevista para julio de 2026 junto con México.
El tema tensiona aún más las relaciones comerciales que involucran a Canadá y Estados Unidos, con repercusiones directas para México y la región dada la importancia del tratado trilateral. La suspensión de las pláticas llama la atención hacia el futuro inmediato del comercio norteamericano y la estabilidad del T-MEC.


































