Álex Márquez cerró la temporada de MotoGP como subcampeón del mundo y ya tiene la mira puesta en 2026. El piloto de Gresini Racing acaba de confirmar que el próximo año correrá con una moto oficial de Ducati, igual que su hermano Marc Márquez, lo que le abre la puerta para pelear por el título a su lado.
El paso a la moto oficial lo confirmó él mismo este jueves en Madrid durante un acto de Estrella Galicia 0,0, su patrocinador histórico. “No lo veo como una presión, sino como una prueba para mí mismo, para no quedarme con dudas. Me da tranquilidad”, dijo Álex, que acaba de asegurar la segunda plaza del Mundial tras festejar su tercera victoria del año en Sepang.
Sobre el reto de plantar cara a su hermano, siete veces campeón de MotoGP, Álex lanzó un dardo directo: “Marc no es inalcanzable, pero es muy difícil. Tiene una precisión y explosividad que yo no alcanzo, aunque a él le falta la calma que yo tengo”.
Los dos Márquez coincidirán en 2026 con las mismas armas, una pelea que ya palpita en el ambiente de MotoGP. Preguntado por la celebración conjunta, Álex prometió que pronto habrá fiesta para ambos: “Nos debemos una. Cuando te toca vivir algo así, no te das cuenta hasta que estés en el sofá dentro de 10 años”.
La temporada no les ha permitido compartir mucho tiempo por la lesión de Marc, que está en proceso de recuperación. “Está tranquilo, con toda la asistencia médica que necesita, y coincidimos más jugando a la Play. Él sabe que puede recuperarse dentro del plazo que han dado los médicos”, confirmó Álex.
El salto a la moto oficial es un gran paso en la carrera de Álex, que ganó antes títulos en Moto3 y Moto2 pero ha sufrido las comparaciones constantes con su hermano. Ahora tiene herramientas para cerrar esa brecha en pista y pelear por la corona de MotoGP con una Ducati a la altura de los mejores.
Este anuncio sacude el tablero de MotoGP para la próxima temporada y deja claro que la rivalidad Márquez seguirá siendo el foco del campeonato.
