Las asociaciones de acogimiento familiar en L’Alfàs del Pi han lanzado un llamamiento urgente para aumentar el número de familias que acojan a menores tutelados en la Comunidad Valenciana. Actualmente, hay 3.900 menores viviendo en centros tutelados por las administraciones públicas, pero solo la mitad cuentan con una familia de acogida.
La situación se mantiene oculta para gran parte de la sociedad valenciana, que desconoce las duras condiciones en las que viven cientos de niños y adolescentes bajo tutela administrativa. Los centros cumplen su función, pero no sustituyen el calor y estabilidad que ofrece un hogar familiar.
El requerimiento de las asociaciones busca movilizar tanto a familias interesadas como a las instituciones para acelerar el proceso de acogida y garantizar un entorno más humano y seguro para estos menores. La estadística actual es un reflejo preocupante: apenas el 50% de los menores tutelados han sido incorporados a alguna familia.
Fuentes de los grupos organizadores de las jornadas de acogimiento familiar destacan que el objetivo es “cambiar esta realidad, ofrecer alternativas reales y mejorar la vida de estos niños”. Señalan que la falta de familias se suma a otras dificultades institucionales que ralentizan la integración.
Desde la administración recuerdan la importancia de la acogida como fórmula preferente frente al ingreso prolongado en centros residenciales, que debe ser una medida excepcional y temporal.
La iniciativa en L’Alfàs del Pi pretende servir de llamada para que la sociedad participe y tome conciencia. Mientras, cientos de menores siguen esperando un hogar que les dé estabilidad y apoyo.
