Los autónomos de La Rioja, agrupados en la Federación de Empresas de La Rioja (FER), han rechazado de forma rotunda la propuesta del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de subir sus cuotas en 2026.
Desde la FER denuncian que el aumento previsto, que podría llegar hasta un 35%, será un “castigo” excesivo que desincentivará la creación de empresas y el empleo. Añaden que la subida se suma a otras cargas ya vigentes, generando una presión fiscal insostenible para este colectivo.
“Si sale adelante esta medida será un nuevo mazazo para los autónomos, que ya enfrentan múltiples barreras como los permisos laborales y la facturación electrónica”, señalaron.
Los autónomos recuerdan que en enero entró en vigor la facturación electrónica, que ha incrementado costes y complicaciones burocráticas. Además, apuntan que la implantación del registro electrónico de jornada supondrá nuevos desembolsos que complicarán aún más su gestión diaria.
Desde la FER consideran que esta escalada de costes y normativas se realiza sin diálogo ni negociación previa, dejando a miles de pequeños empresarios en La Rioja desprotegidos. “Hay otro camino más razonable: situar a los autónomos en el centro de las políticas públicas y no en la diana”, insisten.
Los autónomos exigen una reducción de la presión fiscal y burocrática, y una adaptación de las normativas a su realidad, mayoritariamente compuesta por negocios de pequeño tamaño. Además, piden que se reduzcan los costes laborales y se mejore la gestión sanitaria para combatir el aumento del absentismo laboral que impacta en su actividad.
“Es urgente mejorar la gestión sanitaria, aumentar el protagonismo de las mutuas y controlar mejor el absentismo”, apuntaron desde la FER.
Concluyen recordando que los autónomos son el motor principal de la economía y empleo en España, y que esta subida de cuotas creará incertidumbre que puede frenar la creación de nuevos proyectos, afectando negativamente al mercado laboral y la economía regional.
