La Comunidad de Madrid aumentó la partida en su presupuesto para la tauromaquia, una decisión que ha generado críticas duras desde el PP y el Gobierno Central.
Mientras el Gobierno de Isabel Ayuso refuerza su respaldo económico a las corridas de toros, el presidente Pedro Sánchez fustigó a la derecha en el Senado, calificando de “circo” la bronca política que vive España.
El aumento de fondos para la tauromaquia ha enardecido a senadores, diputados y figuras afines al PP. Pero Sánchez devolvió el golpe, denunciando que el verdadero “circo” es el enfrentamiento político actual, más violento y zafio que artístico.
El debate pone en evidencia la profunda división política en España. Mientras el PP ve en la tauromaquia un símbolo cultural que merece apoyo, Sánchez critica que los recursos públicos estén destinados a un gasto que para muchos está en cuestión, aunque no ofreció cifras concretas sobre el incremento presupuestario concreto.
El presidente del Gobierno recordó que el Senado y el Congreso cuestan a los españoles alrededor de 230 millones de euros anuales, y acusó a la oposición de perder el tiempo con ataques “ruines, incultos y tramposos” sin contenido real.
El texto original no detalla el monto exacto del nuevo presupuesto para las corridas en Madrid, pero sí apunta a un aumento significativo que prende la mecha política. Desde la derecha sostienen que no hay estrategia para enfrentar a Sánchez, quien mantiene el control del discurso con provocaciones constantes.
Para Sánchez, el PP actúa como un torero sin arte, enfrentando con rudeza y sin técnica su oposición, y por eso creen que seguirán fracasando en convencer a la opinión pública. Según el presidente, la clave está en controlar el ambiente político, elegir el terreno y dominar el ritmo del debate, algo que la derecha no está logrando.
El choque entre ambas posiciones pone en primer plano no solo la tauromaquia sino también la forma en que se conduce la política española hoy, marcada por la crispación y las provocaciones en Cámara.
En resumen, Madrid apuesta por reforzar la tauromaquia con fondos públicos, mientras la confrontación con el Gobierno central escala y el PP recibe duros reproches por su estilo y falta de estrategia para hacerle frente a Sánchez.


































