El Gobierno de Castilla-La Mancha trabaja en varios proyectos para darle un nuevo rumbo al antiguo convento de Santa Fe en Toledo tras la salida del coleccionista Roberto Polo. La decisión sobre el futuro del espacio la tomará el presidente regional, Emiliano García-Page, y se anunciará en su momento, según confirmó este martes la viceconsejera de Cultura, Carmen Teresa Olmedo.
Olmedo habló en la inauguración de la exposición ‘Ciudad de Vascos’ en el Museo de Santa Cruz de Toledo y destacó que desde los servicios de Museos, la Fundación Impulsa y el propio Gobierno regional se están recibiendo “propuestas variadas” para mantener el Santa Fe como un “referente artístico” en la ciudad. “Hay una inquietud cultural tremenda en Castilla-La Mancha, especialmente en Toledo”, agregó.
El Gobierno regional negocia la retirada paulatina de la colección de Polo en Toledo y Cuenca tras un acuerdo mutuo que responde, explican, al bajo crecimiento en el número de visitantes que generaban estas exposiciones. Además, el coleccionista quiere mostrar su obra en otros espacios mientras la Junta planea renovar las colecciones que ocuparon dichos lugares.
Olmedo indicó que las obras se mantendrán expuestas en Toledo y Cuenca hasta finales de año, mientras terminan de cerrar los detalles con el coleccionista y sus representantes.
El desembarco cultural de Polo, uno de los grandes mecenas en la región en los últimos años, terminó porque ni sus propuestas ya generaban aumento de público ni la Junta quería seguir con la misma muestra. Con este cambio el Gobierno regional pretende dar entrada a nuevas propuestas artísticas que mantengan viva la tradición cultural de Toledo, un objetivo que subrayan como clave para el futuro.
