Un hombre de 40 años, detenido el domingo en Lleida acusado de violar a su hija de 21 años en plena calle y ante la presencia de su hijo menor, fue condenado este miércoles a cuatro meses de cárcel por quebrantar la orden de alejamiento y quedó nuevamente en libertad.
El presunto agresor, arrestado inicialmente por la violación denunciada por la joven, pasó a disposición judicial y la jueza decretó su libertad provisional con medidas cautelares estrictas: no acercarse a menos de 200 metros de la víctima y prohibición de comunicarse con ella.
Sin embargo, apenas fue liberado el martes, incumplió la orden judicial e intentó contactar con su hija en su domicilio, por lo que fue detenido de nuevo ese mismo día por quebrantar estas medidas. Este miércoles se celebró un juicio rápido por esa causa.
Tras admitir los hechos, el tribunal le impuso una condena de cuatro meses de prisión, que quedó suspendida durante dos años por no contar con antecedentes penales. De este modo, el acusado volvió a quedar en libertad.
Ni la Fiscalía ni la defensa de la víctima solicitaron su ingreso inmediato en prisión tras la primera detención. La joven había denunciado que el hombre abusó de ella en varias ocasiones y que la embriagaba para forzarla.
Fuentes judiciales reiteran que siguen vigentes las medidas cautelares y advierten que si vuelve a incumplirlas, ingresará en prisión provisional. El caso sigue abierto por un delito contra la libertad sexual.
Denuncia por maltrato en Colombia
El caso tiene otra arista. Según el diario Segre, la esposa del acusado le denunció por maltrato habitual. Estos hechos habrían ocurrido cuando la pareja vivía en Colombia, país de origen de ambos.
