El Gobierno de Pedro Sánchez vive hoy un momento delicado en el Congreso con el bloque de investidura en clara fractura. La sesión de control promete tensión tras la última derrota parlamentaria, donde Podemos, Junts y otros socios evidenciaron su desencuentro con el Ejecutivo.
Este martes, Sánchez no interviene en la Asamblea General de la ONU: la voz española la toma el rey Felipe VI en un gesto por el 70 aniversario de España en la organización. Esta misma cumbre ha traído un giro inesperado en la postura internacional sobre Ucrania: Donald Trump se reunió con Volodímir Zelenski y lanzó un mensaje optimista al asegurar que Ucrania puede recuperar todo el territorio perdido, un cambio radical tras sus mensajes previos que exigían concesiones territoriales.
De vuelta en la política española, la relación entre el PSOE y sus socios lejos de mejorar, se tensa. Junts ha vuelto a amenazar con abandonar la coalición antes de Navidades si no cambia la situación. En el último debate, Miriam Nogueras cargó contra la política migratoria acusando a los inmigrantes de “quitar ayudas” a los catalanes y de no integrar el idioma, mientras que el propio Gabriel Rufián habló de racismo, en un claro desgaste para la unidad del bloque.
Hoy se vota en el Congreso la reprobación de la ministra Ana Redondo por el escándalo de las pulseras contra el maltrato, otro foco de polémica para el Ejecutivo. Redondo aseguró que ya ha dado toda la explicación necesaria, pese a que no ha respondido a las críticas de fondo y se limitó a hablar de “bulos” y criticar al PP.
En otro ámbito, Claudia Cardinale, uno de los grandes mitos del cine europeo y musa de Fellini o Sergio Leone, ha fallecido. La actriz que debutó en los años 50 tras ganar casualmente un concurso de belleza comenzó una carrera estelar con películas como El Gatopardo o Ocho y Medio. Su muerte marca el fin de una era en el cine.
Hoy el Gobierno de Sánchez tiene ante sí un claro termómetro para medir la fragilidad de su alianza en el Congreso, mientras se suceden disputas que pueden marcar la estabilidad política de la legislatura.
