El Tribunal Supremo ha citado como imputados a José Luis Ábalos y a su asesor Koldo los próximos 15 y 16 de octubre, en el marco del caso Koldo que investiga presuntas adjudicaciones irregulares y pagos en efectivo mediante sobres entregados en Ferraz.
La investigación, impulsada por un informe reciente de la Unidad Central Operativa (UCO), apunta a una posible financiación irregular y sobornos dentro del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Ábalos, exsecretario de Organización y exministro, ha reconocido que la entrega de sobres con dinero era una práctica habitual en el partido para sus dirigentes, lo que abre interrogantes sobre la raíz y el alcance del caso.
Este escándalo, que afecta a uno de los ministerios con mayor presupuesto, sigue en el centro del debate público y político. En la tertulia del programa ‘Más de uno’, el periodista David Jiménez Torres ha destacado dos retos clave para la defensa del PSOE. Primero, el tono público que ha tomado el asunto, con Ábalos en un papel cercano al “cuentista”, ha desviado la atención de la gravedad real, un entramado de corrupción profundo. Segundo, Jiménez Torres señala que las últimas encuestas muestran una recuperación del PSOE, sugiriendo que “se ha alcanzado un umbral a partir del cual el votante socialista ya no castiga” a su partido pese a las continuas denuncias.
“Parece que se alienta la expectativa de que si se probara la financiación irregular entonces sí cambiaría el voto, pero hasta entonces el PSOE resiste en las urnas”
El periodista advierte que una sentencia condenatoria sobre financiación irregular puede tardar años, y antes habrá elecciones generales. Además, cuestiona si el voto de izquierda cambiará por esa causa cuando el partido sigue siendo visto por muchos como un dique contra la extrema derecha.
Por su parte, Carlos Alsina ha resaltado en la misma tertulia que “el PSOE lo tiene muy fácil” en términos electorales, sugiriendo que la defensa política del partido juega con un electorado que no prima la corrupción electoralmente.
Lo cierto es que el caso Koldo sigue en el ojo del huracán. El Supremo buscará concretar responsabilidades la próxima semana, en una causa que puede marcar la agenda política y electoral del PSOE en los meses venideros.
