Izquierda Unida, Sumar y Verdes-Equo confirmaron una alianza electoral para las elecciones autonómicas de Castilla y León en marzo de 2026, excluyendo a Podemos.
Este bloque de izquierdas ha decidido dejar atrás la negociación con Podemos tras el último rechazo de la formación morada a unirse a una candidatura conjunta en la comunidad. El proceso de primarias para elegir candidato arranca el próximo lunes, 3 de noviembre, con la recogida de avales y la votación provincial si hay más de un aspirante.
Juan Gascón, coordinador autonómico de IU y uno de los favoritos, defendió la apertura total a candidaturas, incluidas personas ajenas a las formaciones, y lamentó la falta de acuerdo con Podemos.
“Cada uno que explique su incoherencia, por qué en Extremadura sí puede haber confluencia y aquí no”, dijo Gascón.
Por su parte, Podemos se mantiene al margen. Pablo Fernández, secretario de Organización del partido, evitó tocar detalles pero sostuvo que su prioridad es crear listas “plurales y heterogéneas” para “poner a la izquierda en pie”. El nuevo coordinador autonómico de Podemos en Castilla y León, Miguel Ángel Llamas, anunció ya su intención de ser candidato a la Junta.
Llamas ha presentado propuestas para reactivar el debate político, incluyendo un “debate a la portuguesa”, mejoras en el transporte regional y medidas para abaratar el alquiler en zonas tensionadas.
Con esta triple alianza, Izquierda Unida recupera protagonismo tras su reciente baja en coaliciones con Podemos y Sumar. El objetivo es competir unidos y desbancar al PP del Gobierno autonómico, presentándose con las siglas combinadas y un lema que refleje una izquierda transformadora y vinculada a la sociedad civil, sindicatos y movimientos sociales.
Los partidos impulsan un sistema de primarias “de abajo hacia arriba” para armar las listas por provincias sin interferencia externa y sin vetos, buscando ampliar la base social de la izquierda en la región.
Así, la izquierda en Castilla y León se fractura, con Podemos apostando por ir a su ritmo y las otras tres fuerzas apostando por una candidatura unida antes que arriesgarse a disputas internas.

































