Un joven de 23 años recibió cuatro disparos en La Gomera tras un altercado con agentes de la Policía Local y la Guardia Civil. Los hechos ocurrieron el pasado lunes por la mañana en San Sebastián de La Gomera.
El joven, identificado como Aitor, presentaba problemas de salud mental y había dejado de tomar su medicación. Sus padres pidieron ayuda a través del 1-1-2 para que los agentes intervinieran y ayudaran a administrar su tratamiento.
Según la familia, Aitor no había agredido ni molestado a nadie antes de la intervención. Tras la administración de la medicación, el joven huyó y fue perseguido por dos policías locales y dos guardias civiles.
El enfrentamiento terminó con cuatro disparos en el cuerpo de Aitor, efectuados supuestamente por una agente de la Guardia Civil. Tras ser atendido inicialmente en el hospital de La Gomera, fue trasladado al Hospital Universitario Nuestra Señora de La Candelaria en Tenerife, donde fue operado por las heridas.
Los familiares acusan a las fuerzas de seguridad de actuar de manera desproporcionada y de poner en riesgo a civiles y compañeros debido a los rebotes de la munición utilizada. También denuncian que, pese a estar presentes en urgencias, nadie les preguntó por su versión de los hechos.
Aitor permanece detenido como presunto autor de un delito de atentado contra agentes de la autoridad mientras sigue ingresado. Los agentes implicados abandonaron el hospital media hora después de su llegada sin lesiones visibles.
Las autoridades no han precisado hasta ahora quién efectuó los disparos. La investigación está abierta y la familia espera una explicación sobre el uso de la fuerza empleada en un caso donde originalmente se había solicitado ayuda médica y no policial.
