La Fúmiga, una de las bandas más icónicas de la música popular valenciana, anunció este jueves su retirada definitiva. La despedida oficial será en 2026 con dos conciertos especiales aún sin fecha confirmada en el Sant Jordi Club de Barcelona y el Roig Arena de Valencia. Según la productora, el cierre en el Roig Arena reunirá a unas 18.000 personas para un “punto final épico”.
Antes de la gran despedida, la agrupación valenciana recorrerá varias ciudades como Gandia, Alzira, Caldes de Montbuí, Cabanes, Bruselas, Vall d’Uixó, Montmeló, Girona, Canals, Ondara y Valls. La gira culminará el 30 de diciembre en el Festivern de Tavernes de la Valldigna.
El comunicado oficial deja claro que “la cuenta atrás ha empezado” para una banda que, en más de una década, ha revolucionado la música tradicional valenciana fusionándola con sonidos urbanos y festivos, siempre con compromiso social. “La Fúmiga no es sólo una banda: es un relato colectivo”, señala la productora.
Fundada en Alzira en 2012 y con raíces en la Sociedad Musical de la localidad, La Fúmiga surgió tocando en pasacalles y festivales de verano. Su evolución fue rápida. En 2017 alcanzaron disco de oro con Mediterrània, y en 2019 consolidaron su éxito con Espremedors. Durante la pandemia, su EP Pròxima parada fue un refugio musical para muchos seguidores.
El último trabajo, Tot està per fer (2024), con colaboraciones de artistas como Figa Flawas y The Tyets, reafirmó su estatus como referentes generacionales. La banda destaca por defender los derechos humanos, feminismo, antifascismo y diversidad desde sus letras y actuaciones.
Los conciertos de despedida prometen ser especiales, con sorpresas y colaboraciones de grupos amigos. Además, rendirán homenaje a la música valenciana popular que nace en las calles, a las sociedades musicales y a las nuevas generaciones que seguirán su legado.
“Todo se acaba, sí, pero lo hará por la puerta grande”, concluye el grupo en el vídeo de despedida difundido en redes sociales.
Más de una década después de su fundación, La Fúmiga cierra un capítulo que marcó una generación y dejó un legado que une fiesta, cultura y compromiso social en la música valenciana.
