La ministra de Seguridad Social, Elma Saiz, rechazó eliminar las penalizaciones de la jubilación anticipada para quienes han cotizado más de 40 años, afectando a unos 900.000 pensionistas. Esta negativa llega pese a la propuesta de Podemos y el colectivo Asjubi40, que califican el sistema de “discriminatorio” e “injusto”.
Saiz defendió que las reformas en el sistema de pensiones ya incorporan las medidas necesarias y cumplen las recomendaciones del Pacto de Toledo para prolongar la vida laboral.
El abogado laboralista Ignacio Solsona, en su canal de YouTube Laboroteca, desmonta esta postura con datos duros. Según su cálculo, una persona que haya trabajado 40 años y decida jubilarse a los 63 años con una pensión de 2.000 euros sufre una penalización del 19%. Esto reduce su pensión a 1.620 euros mensuales, 380 euros menos.
Esto se traduce en una pérdida acumulada de 106.400 euros si vive 20 años tras jubilarse, sin contar las subidas anuales. “Se adelantan dos años de cobro, pero compensan menos de la mitad de lo que se pierde por la penalización”, explica Solsona.
Para una jubilación adelantada 18 meses, la penalización baja al 8,4%, con una pérdida total de 47.040 euros en 20 años. Pero la situación es más grave para los desempleados mayores de 52 años que cobran el subsidio de 480 euros y quieren jubilarse. Si lo hacen cuatro años antes, aplican una penalización del 28%, llegando a recaer en una pérdida de 156.800 euros.
Solsona defiende que la propuesta de Asjubi40 eliminaría estas penalizaciones para quienes cotizaron más de 40 años, incluso estableciendo recalcular jubilaciones ya concedidas. Esto beneficiaría a pensionistas que actualmente pierden miles de euros por adelantarse a la edad legal de retiro.
El debate sigue abierto, mientras miles de trabajadores se enfrentan a una decisión amarga: jubilarse antes y perder mucho dinero o esperar y cobrar plenamente su pensión.


































