Miles de estadounidenses tomaron las calles este sábado en ciudades clave como Nueva York, Washington y Miami para protestar contra lo que llaman un “autoritarismo creciente” del presidente Donald Trump.
La convocatoria, bajo la consigna “No Kings” (“No queremos reyes”), reunió a multitudes que rechazan lo que interpretan como un intento de Trump de exceder sus poderes presidenciales. Los manifestantes coreaban mensajes contra la concentración de poder y exigían respeto a las instituciones democráticas.
En Nueva York, miles marcharon desde el centro hasta el parque Washington Square, mientras que en la capital estadounidense la protesta tuvo eco frente al Capitolio. Miami también vio una movilización masiva en señal de rechazo.
Esta ola de manifestaciones se produce en un clima político tenso, con críticos que alertan sobre un posible debilitamiento de la separación de poderes bajo la administración Trump. No hubo reportes de incidentes graves hasta el momento.
Las protestas dejaron claro un mensaje unánime: una parte importante de la ciudadanía estadounidense no quiere líderes con poder absoluto ni simbologías asociadas a monarquías o regímenes autoritarios.
