El Almería reafirmó su racha con una victoria 4-2 ante el Real Zaragoza en el estadio Mediterráneo, sumando 10 puntos de 12 posibles, pero el técnico Rubi frenó los entusiasmos y pidió cautela.
En rueda de prensa, Rubi reconoció que dominaron la mayor parte del partido, especialmente la primera hora, pero admitió que el equipo bajó la intensidad y concedió demasiadas opciones al rival.
“Hasta el 2-0 merecimos ese resultado, situaciones controladas, pero luego el Zaragoza tiró de orgullo y eso nos complicó el partido”
, comentó el entrenador catalán.
Rubi hizo especial hincapié en la necesidad de cerrar los partidos con más agresividad en ataque. Criticó que, tras el 2-0, el Almería cedió la pelota demasiado tiempo al Zaragoza, que aprovechó para recortar distancias.
“Hay que meterle más cuchillo, hubo muchas acciones cerca del área que no supimos definir y eso nos costó un susto”
, explicó.
El entrenador también destacó el esfuerzo defensivo colectivo y la importancia del equilibrio en el equipo. Reconoció la labor de jugadores como Embarba, Arribas y Melamed, que aportan en defensa pese a sus cualidades ofensivas. “Aquí atacamos y defendemos todos”, insistió.
Rubi cerró su análisis con un mensaje claro para quienes interpretaron la reacción del equipo como relajación consciente.
“No fue una relajación voluntaria, sino que el Zaragoza se abrió y tuvimos muchas contras para hacer más daño, fallamos y eso me enfada”
.
El entrenador mantiene los pies en la tierra pese a la buena racha, consciente de que hay margen para mejorar y la temporada aún es larga. El Almería, cargado de talento y gol, busca consolidar su posición en la zona alta de LaLiga SmartBank.
