Sergio Dalma visitó El Hormiguero esta semana para presentar su nuevo álbum, ‘Ritorno a Via Dalma’, un homenaje a la música italiana con canciones de Laura Pausini y Battiato.
Pero no todo fue serio. El cantante sorprendió al revelar su lado bromista: “Tuve una época de hacer muchos calvos”, aseguró en la charla con Pablo Motos. Aunque aclaró que ya dejó atrás esa etapa, contó una broma fuerte que le gastó a sus propios músicos.
“Una vez compré comida de gatos y unte tostadas en el catering”, relató Dalma. “Alguien picó y luego se lo conté”. La anécdota arrancó sonrisas en el plató, y el artista aseguró que también acepta las bromas que le hacen.
Esta vertiente divertida contrasta con el tono más melódico y nostálgico de su último disco, que revive éxitos italianos clásicos. Dalma combina esa sensibilidad con una vena pícaramente traviesa que pocos conocían.
Su paso por El Hormiguero dejó una faceta distinta del artista, entre música y risas, mientras promocionaba uno de los regresos más destacados en la escena de la canción italiana en España.


































