Cerca de un millón de personas han sido evacuadas en Filipinas ante la llegada del supertifón Fung-wong, que ya causa fuertes vientos e inundaciones en varias regiones del país. La Defensa Civil informó este domingo que 916,863 personas fueron desplazadas para su seguridad.
Rafaelito Alejandro, alto funcionario de la Defensa Civil, detalló que las ráfagas podrían alcanzar los 230 km/h a partir del domingo por la noche, lo que justifica la urgente operación de evacuación en zonas vulnerables.
El supertifón Fung-wong continúa ganando fuerza mientras avanza en dirección a las islas filipinas. Las autoridades mantienen la alerta máxima y apelan a la calma, recordando que el fenómeno ha comenzado a provocar desbordes e inundaciones en ciertas áreas.
El operativo ha mobilizado recursos públicos y privados para asegurar centros de emergencia y garantizar el traslado seguro de la población. Casi un millón de personas están fuera de riesgo inmediato mientras Fung-wong se acerca con amenaza directa.
El gobierno filipino sigue monitoreando el movimiento del tifón y ha recomendado a los habitantes no salir de sus refugios hasta que pase la tormenta. Las próximas horas serán decisivas para medir el impacto físico y humano en el país.


































