Charlie Dalin, vencedor del último Vendée Globe, reveló que completó la emblemática regata de vela en solitario alrededor del mundo mientras luchaba contra un cáncer. Diez meses después de su victoria, el marinero francés cuenta, con discreción, la batalla silenciosa que libró durante la competición.
En un libro publicado este jueves, La force du destin (Gallimard), Dalin confiesa que una tumoración en el abdomen, diagnosticada en octubre de 2023, estuvo presente posiblemente desde años atrás, y acaso incluso durante su primer Vendée Globe. Se trata de un GIST, un tumor gastro-intestinal raro.
Pese a la carga médica, con tratamiento diario y un seguimiento riguroso, el navegante normando decidió mantener su preparación y no renunciar a la carrera. El día del inicio del Vendée Globe, ya sabía que competiría con una “alarma” constante recordándole la enfermedad, que se tradujo en dolores y calambres musculares recurrentes durante los 64 días en alta mar.
“Un pomelo en el estómago, ¿se lo imaginan?”, explicó Dalin entre ironía y gravedad en una entrevista para Le Parisien.
A bordo de su monotipo, optimizado para mejorar la recuperación entre etapas, Dalin logró abstraerse y concentrarse exclusivamente en la navegación, al punto que casi nadie sospechaba la batalla sanitaria que libraba. Tras cruzar la línea de meta en primer lugar, estuvo a punto de anunciar la verdad en la conferencia de prensa, pero temió que dicha revelación eclipsara su logro deportivo.
“Quizás quise disfrutar mi victoria sin que me hablen de esto, aunque fue claramente una doble victoria”, dijo.
El proyecto editorial surgió a iniciativa de su editor, sin que supiera sobre su condición médica. Dalin continúa en tratamiento, que se está endureciendo, y aunque no puede plantearse una nueva participación en el Vendée Globe a corto plazo, mantiene la esperanza de regresar a la navegación lo antes posible.
Este caso muestra un lado humano poco visible detrás de uno de los eventos más duros del deporte francés. Dalin trasciende lo deportivo y ofrece un mensaje contundente: se puede seguir soñando y persiguiendo metas incluso enfrentando enfermedades graves.
