Abu Dhabi fue testigo de una sorpresa desagradable este sábado en el combate por el título mundial de peso pesado de UFC entre el francés Ciryl Gane y el británico Tom Aspinall. El combate fue detenido al minuto 4:35 del primer round, cuando Aspinall quedó incapacitado para continuar tras recibir un golpe involuntario en el ojo.
La pelea arrancó con ritmo fuerte, donde Gane parecía tomar la iniciativa tras meses de preparación intensa. Sin embargo, en medio de un low-kick, el francés tocó accidentalmente con dos dedos el ojo derecho del campeón Aspinall. Tras varios minutos de pausa, el británico comunicó que no podía ver con ese ojo, obligando al árbitro a decretar un no-contest.
Aspinall conserva así el cinturón de los pesos pesados, dejando pendiente un nuevo enfrentamiento que se espera para los próximos meses. El resultado frustró las expectativas de un combate decisivo, ya que ambos peleadores buscaban resolver quién es el auténtico rey de la categoría.
Gane, de 35 años, se mostró visiblemente afectado tras la decisión. En medio del octágono, se prosternó y declaró:
“Estoy realmente apenado por lo que pasó, por Aspinall y mi equipo. Hemos trabajado muchísimo”
Añadió que hubiera preferido un KO limpio para un cierre más satisfactorio.
Esta fue la tercera oportunidad de Gane de ganar la corona. Había disputado el título antes ante dos leyendas: perdió por poco contra Francis Ngannou en 2022 y fue derrotado con contundencia ante Jon Jones en 2023. Por su parte, Aspinall se hizo campeón indiscutido tras la retirada de Jones y mantiene firme su reinado.
La UFC y los equipos involucrados ya consideran fechas para la revancha, que podría decidir finalmente al campeón legítimo de la división más codiciada.
El combate terminó sin un vencedor claro, pero con la certeza de que esta rivalidad sigue viva y el desenlace real aún está por venir.

































