Dahbia Benkired, condenada por el brutal asesinato y violación de la niña Lola Daviet, no apelará su condena a cadena perpetua incomprensible, según confirmó su abogado, Me Alexandre Valois.
La mujer de 27 años, originaria de Argelia, fue sentenciada el viernes 24 de octubre tras un juicio marcado por detalles estremecedores. El tribunal la declaró culpable de tortura, violación y asesinato con extrema crueldad, la pena más dura prevista en el Código Penal francés y que elimina cualquier posibilidad de reducción o liberación anticipada.
El crimen ocurrió el 14 de octubre de 2022 en el barrio Manin, en el distrito 19 de París. Dahbia llevó a Lola, de 12 años, al estudio de su hermana donde empezó “una hora y 37 minutos de torturas”, según el fiscal. La menor fue desnudada, obligada a ducharse, violada repetidamente y asfixiada con cinta adhesiva. Durante la agonía, la agresora escuchaba música para no oír sus súplicas.
Además, el cuerpo presentaba 38 heridas producidas con cuchillo y tijeras, algunas infligidas cuando Lola aún estaba con vida. Benkired pintó con esmalte rojo los números “0” y “1” bajo los pies de la niña y puso el cadáver rociado con lejía dentro de una maleta de plástico con ruedas, que fue encontrada esa misma noche en la residencia.
Durante el proceso, la acusada ofreció explicaciones incongruentes: desde venganza por un acceso negado por la madre de Lola, a rituales de brujería, hasta planes de vender un riñón de la víctima, incluso citó odio hacia un excompañero vinculado al drama.
“Eso me calma un poco pero Lola no volverá… Hemos recibido la justicia que esperábamos”, declaró la madre de Lola a Le Figaro tras conocer que no habrá apelación.
El rechazo a apelar por parte de Dahbia cierra el capítulo judicial en primera instancia y evita otro juicio desgarrador para la familia. La sentencia incluye la expulsión definitiva de Benkired de territorio francés, reforzando el peso de la condena.
Este caso estremeció a Francia por la brutalidad y el sufrimiento de una niña indefensa en manos de una vecina con motivos oscuros y siniestros. Ahora, se da por concluido un proceso que dejó heridas abiertas e incontables interrogantes para quienes conocieron a Lola y reclaman respuestas.
						
									































