Una red de tráfico de cannabis que realizaba envíos de casi 500 kg por viaje fue desmantelada tras una investigación de la policía antinarcóticos de Lyon (Ofast).
Desde finales de agosto, los agentes seguían de cerca a un grupo dedicado al transporte rápido y masivo de resina de cannabis desde España hasta el área de Saint-Étienne. Utilizaban un SUV alemán, robado y con matrículas falsas, que transitaba siempre por el mismo trayecto: A9, luego A7, para dejar la droga en la zona.
Los policías lograron conectar cerca de diez viajes de esta red antes de su captura. En la madrugada del 3 de octubre, tras localizar el vehículo al entrar en Francia por la frontera, comenzó una persecución a alta velocidad entre Valence y Vienne. El conductor, que ya tenía varios antecedentes y estaba prófugo con tres órdenes de captura, intentó huir con maniobras peligrosas e incluso lanzó clavos y shurikens a la policía para evitar ser detenido.
Finalmente, con las ruedas pinchadas, abandonó el coche y huyó a pie pero fue arrestado poco después. Dentro del SUV fueron encontrados cerca de 500 kilos de resina de cannabis dispuestos en el asiento trasero y maletero.
Además del arresto del conductor, el fin de semana se detuvo a tres personas relacionadas con él, todos con roles claves en la logística: vigilaban puntos de control para facilitar el paso y abrían la ruta en distintos tramos.
Este modus operandi, conocido como “go fast”, implica un reparto organizado para evitar controles y, según fuentes policiales, el conductor podía ganar hasta 10,000 euros por viaje. El juez de Saint-Étienne abrió una investigación judicial en octubre tras recibir el respaldo de la policía nacional.
Esta operación muestra cómo individuos buscados por la justicia recurren al narcotráfico para financiar su huida, aumentando la peligrosidad del delito y el riesgo para las fuerzas del orden.
Los cuatro detenidos fueron presentados ante el tribunal judicial de Saint-Étienne. Tres siguen en prisión preventiva, mientras uno continúa bajo control judicial.
