El coronel de reserva Achille Müller, con 100 años cumplidos, volvió a los cielos este lunes pilotando un helicóptero Tigre del 4º Régimen de Helicópteros de Fuerzas Especiales (4º RHFS) en Pau-Uzein, la base de helicópteros más grande de Europa.
Müller, veterano del Desembarco de Normandía, Indochina y Argelia, aceptó la invitación de las fuerzas especiales béarnaises para cumplir un sueño largamente acariciado: manejar un helicóptero en pleno vuelo, bajo la supervisión estrecha de un piloto del regimiento. “No me impresiona nada”, aseguró con la ironía que lo caracteriza después de años en combate.
Con la ayuda de los militares, el resistente y ex SAS se colocó el casco “TopOwl” y accedió con esfuerzo al puesto de mando del Tigre, un aparato moderno y pesado a diferencia de las aeronaves primitivas en las que voló durante la Segunda Guerra Mundial. “Es una máquina impresionante, con cañones, cohetes y misiles Hellfire”, comentó, fascinado pero firme.
La pequeña pero emotiva travesía comenzó poco antes de las 10 de la mañana. A los mandos, el capitán “Pat” guió el helicóptero y permitió que Müller tomara el control por varios minutos. “Al principio necesitó adaptarse, el Tigre es más nervioso, pero lo hizo muy bien”, confirmó un soldado del 4º RHFS que acompañó el vuelo.
Tras sobrevolar la región de Pau y acercarse a las montañas, el veterano recordó sus épocas en Alemania y compartió anécdotas con los militares a bordo. “He saltado de helicópteros, he visto cosas peores en mi vida; esto no fue agotador”, afirmó con desparpajo y una sonrisa.
En tierra, el general Jean Laurentin, jefe del Comando de Acciones Especiales Tierra, celebró la iniciativa. “Sabíamos que soñaba con volar en helicóptero. Fue un esfuerzo coordinado, con aprobación médica. Es un héroe y ejemplo para todos. Verlo pilotar un Tigre al borde de los 101 es muy inspirador para la juventud”.
Achille Müller, figura clave en la memoria histórica local y nacional, es actualmente un símbolo vivo de la resistencia y el compromiso. Su vuelo marcó un momento histórico para el 4º RHFS y para los veteranos que aún mantienen intacta la pasión por volar y servir.


































