El nuevo gobierno de Madagascar ha firmado un decreto que revoca la nacionalidad malgache del expresidente Andry Rajoelina, destituido hace diez días tras semanas de protestas populares y una mutinería militar.
La decisión, firmada por el primer ministro Herintsalama Rajaonarivelo, confirma que Rajoelina perdió su ciudadanía al adquirir de forma voluntaria la nacionalidad francesa en 2014, una doble nacionalidad que generó controversia antes de las elecciones presidenciales de noviembre de 2023.
Este decreto publicado en el diario oficial impide a Rajoelina, de 51 años, participar en futuras elecciones en Madagascar. El expresidente había sido depuesto el 14 de octubre luego de que la unidad militar Capsat se uniera a las protestas antigubernamentales, forzándolo a huir del país.
Antes de su destitución, Rajoelina ganó la presidencia en una votación marcada por el boicot de partidos opositores y denuncias de fraude, pero su nacionalidad francesa había sido motivo de llamados a su descalificación que no prosperaron.
El recién investido presidente, el coronel Michaël Randrianirina, asumió el cargo el 14 de octubre y prometió la convocatoria de nuevas elecciones en un plazo de dos años para restaurar la estabilidad política.
Por su parte, Rajoelina ha declarado que permanece escondido para proteger su seguridad personal, sin revelar su ubicación exacta.
La eliminación de su nacionalidad malgache subraya la tensión política en Madagascar y abre un nuevo capítulo en la crisis interna tras el fin abrupto del mandato de Rajoelina.

































