El Gobierno francés anunció este viernes una “victoria fundamental” tras lograr que la plataforma asiática de moda Shein retirara todos los productos ilegales, incluidos muñecos sexuales con apariencia infantil y armas prohibidas.
La decisión llega luego de un ultimátum de 48 horas impuesto esta semana, en el que Shein tuvo que cumplir la ley para evitar una suspensión total en Francia. Según la autoridad que regula las fraudes, ya no hay objetos pedopornográficos, armas blancas o medicamentos ilegales en venta en la plataforma.
Shein suspendió su marketplace, el espacio donde terceros venden productos, para acelerar el proceso. Sin embargo, el comunicado oficial del Gobierno enfatiza que las “procedimientos judiciales contra Shein continúan” y que la empresa sigue bajo “vigilancia estrecha” de los servicios del Estado.
Por otro lado, se informó que el Ministerio del Interior presentó ante el Tribunal Judicial de París una demanda para “poner fin a los graves daños al orden público causados por las reiteradas fallas de Shein”. Al menos cuatro investigaciones están en marcha relacionadas con la venta de muñecos de carácter pedopornográfico, coordinadas por la fiscalía especializada en menores.
La gravedad del caso trascendió las fronteras francesas: el Gobierno solicitó a la Comisión Europea que abra una investigación, y esta reconoció la seriedad de la situación.
El primer ministro Sébastien Lecornu pidió un nuevo informe la próxima semana para evaluar la evolución de Shein y aseguró que se mantendrán todas las medidas cautelares impuestas. El Ejecutivo advirtió que tomará “todas las medidas necesarias para evitar la comercialización de productos ilícitos”.
Además, otras plataformas digitales también están en la mira, aunque no fueron nombradas en detalle.
En resumen, aunque Shein logró evitar la suspensión temporal, está lejos de cerrar este capítulo. La presión judicial y administrativa continúa escalando para proteger a consumidores y preservar el orden público francés.


































