Gregory Clerc, director general del grupo Castel, confirmó esta semana su apuesta por transformar sin romper con el legado de uno de los mayores imperios agroindustriales y cerveceros en África. Fundado por Pierre Castel, el grupo factura cerca de 5.000 millones de euros, opera más de 70 plantas de producción y emplea a 40.000 personas en 22 países africanos.
Clerc aseguró en una entrevista reciente en París que el objetivo es preservar la estabilidad financiera del grupo mientras se adapta a los cambios económicos y sociales del continente. “El legado de Castel es fantástico, pero nada es inmutable”, afirmó, destacando la necesidad de innovación sin ruptura.
El grupo Castel controla un vasto imperio que va desde la producción de cerveza y azúcar hasta el embotellado de agua y la fabricación de envases de vidrio. Su fuerte presencia en África lo convierte en un actor económico clave, con planes claros de expansión sobre todo en mercados emergentes del continente.
Esta estrategia significa una mayor inversión en infraestructura y tecnología para sostener el crecimiento sin comprometer la disciplina financiera que le ha permitido al grupo mantener su peso histórico en el sector agroindustrial y cervecero. Clerc descarta cambios bruscos, apostando por una evolución contenida y sostenida.
El enfoque de Gregory Clerc refleja una visión a medio plazo, donde la consolidación del grupo incluye respeto por la tradición empresarial de Pierre Castel, pero con ajustes necesarios para responder a la competencia regional y las nuevas demandas del mercado africano.
En un entorno económico incierto, donde la competencia extranjera aumenta y los mercados locales evolucionan rápidamente, el grupo Castel bajo Clerc sede firme su posición. Esta noticia llega en un momento clave para las compañías francesas con intereses en el continente negro, que buscan mantener su liderazgo en sectores estratégicos.


































