Un hombre de unos 40 años, residente en la zona de Luxeuil en Haute-Saône, fue condenado el jueves 9 de octubre a 10 meses de prisión firme por posesión de material pedófilo.
El caso salió a la luz el 11 de junio de 2024, cuando un informático acudió a la gendarmería tras descubrir imágenes ilegales en el ordenador de su cliente mientras realizaba una copia de seguridad antes de reinstalar el sistema operativo.
El técnico encontró 26 vídeos y 7 fotos con contenido pedófilo almacenados en el dispositivo. Ratificó su denuncia ante las autoridades, lo que impulsó la investigación realizada por el Tribunal Judicial de Vesoul.
Durante el juicio, el acusado admitió la posesión del material. La justicia consideró la gravedad del delito y dictó una pena de cárcel efectiva de 10 meses sin suspensión.
El fallo busca enviar un mensaje claro contra la posesión y distribución de pornografía infantil, delito especialmente sancionado en Francia.
Las fuerzas de seguridad continúan rastreando posibles vínculos para evitar que este tipo de casos se repita en la región.
